"¡Rodeado de tus matices,
me iluminas!"
Cuando el resto de la ciudad se ha amurallado, enrejado y alambrado, los habitantes del cerro dependen del compañerismo entre vecinos para conseguir algo de tranquilidad. Pueden no tener parques regenerados o calles adoquinadas y alumbradas con faroles ornamentales, pero muchos de ellos viven un ambiente de barrio y vecindad que ya pocos disfrutamos.

Y Mapasingue sigue allí en medio de todo, con casitas grises y techitos de zinc. En lugar de condenarlo y voltear nuestras miradas, sería de inmenso beneficio social destacarlo como lo que realmente es: parte importante de nuestra ciudad. Y el realizar una regeneración urbana de otro tipo, pintar las casas del cerro Mapasingue con los colores de nuestra ciudad: paredes blancas y techos azules. Esto unificaría y homogeneizaría la masa de viviendas convirtiéndolas en un total estéticamente agradable, digno de postales de nuestra ciudad como son los cerros Santa Ana y del Carmen.
86 x 198
Oleo sobre Lienzo
Collage
Autor: Emil Alvarez Campana
Galería - Emil Alvarez C.
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  • Charles Chaplin

  • Bodegón